BeetleJuice, de Tim Burton

200px-beetlejuice.jpgTras realizar y conseguir éxito con “La Gran Aventura de Pee-Wee”, y tras una fructífera trayectoria en el mundo del cortometraje (“Frankeweenie”, “Vincent”) y la televisión (“Hansel y Gretel”), Tim Burton decidió dar el paso que sentaría las bases de su estilo cinematográfico con la historia de un fantasma algo desquiciado.

Adam y Bárbara son un feliz matrimonio que va a comenzar sus vacaciones en su hermosa casa situada en la colina del pueblo en que vive. Sin embargo, dichas vacaciones se verán truncadas por un ligerísimo percance. Y es que de camino a casa sufrirán un accidente que los mandará a la otra vida y les encadenara a pasar sus días como muertos en su hogar. Por si esto fuera poco, pronto recibirán la llegada de los nuevos inquilinos corpóreos, una familia neoyorkina bastante pintoresca que les amargará la existencia. La única forma de echar a esos intrusos vivos es reclamando la ayuda de un bio-exorcista llamado Bitelchús.

Para empezar, ya vemos en esta película que a Tim Burton le gusta hablar del mundo sobrenatural, pero no solo eso sino que descubrimos sobre quien tiene más simpatía el siniestro director. Pues, en contra de lo que se había visto en muchas otras películas en donde la muerte era representada de forma lúgubre y terrorífica y los protagonistas que sufrían eran los vivos, en esta ocasión el brillante director le da la vuelta a la tortilla convirtiendo en victimas a los recientes difuntos. Y es que los pobres Adam y Bárbara no saben como desenvolverse en su nuevo mundo ni como asustar a los nuevos propietarios. Tan solo tienen un “Manual para Difuntos Recientes” que no saben como utilizar salvo para pintar una puerta y pasar a la otra orilla como dicen.
En la otra orilla la cosa no mejora mucho más para ellos, pero si para el espectador, pues va a ver ante sus ojos una sucesión de personajes y circunstancias insólitas llenas de humor negro que ocurren en la sala de espera del mundo de los muertos. Mientras esperan su turno para ver a sus asistente, nuestros queridos difuntos se quedarán de piedra al verse rodeados de un ser chamuscado, y posiblemente pirómano, que intenta dejar de fumar, a un cazador al que un tribal le ha empequeñecido la cabeza, y a la secretaria que tuvo un ligerísimo accidente a la hora de cortarse las venas, quedando esclavizada así a trabajar como funcionaria de por no-vida. También veremos el particular sentido del humor del encargado de llamar por turno, que quedó algo planchado, y del funcionario encargado de la limpieza, cuya explicación acerca de las almas perdidas será rematada por algo muy subrayado para nuestros protagonistas muertos: “Todo está en el manual”.
No solo la galería de personajes ya está repleta de un humor negro en el otro mundo sino la ambientación que este posee nos da mucha información de cómo ve Burton la vida allí. Frente a la vida de los vivos, y en especial de los nuevos inquilinos, caracterizada por colores grises y uniformes, donde existe un orden geométrico establecido, nos encontramos con formas tergiversadas y rocambolescas llenas de luz y color, en especial todo el mundo de los muertos posee cierta iluminación verdosa y azulada, rematada con los particulares cuadritos y líneas blancas y negras que tanto gustan al director. Este estilo, y sobre todo el contraste que se establece aquí, tendrá un mayor desarrollo y exposición en la muy posterior cinta de Burton, “La Novia Cadáver”, película con la cual guarda muchas otras referencias la película presente.

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Los personajes del film son muy particulares, salvo, curiosamente, Bárbara y Adam, que no dejan de ser la típica pareja en apuros, y que consiguen hacer gritar a los nuevos inquilinos, pero gritar de risa a base de posesiones espirituales karaokescas. Los nuevos inquilinos están formados por el matrimonio compuesto por la escultora expresionista con figuras más que extrañas en su colección, Delia, y su esposo, Charles, un constructor que ve negocio en todo lo que hay a su alrededor. La hija del constructor, e hijastra de Delia, Lydia, es una joven que se define a sí misma como “extraña e insólita”, aunque comprobaremos que no es más que una chica que reclama un poco de atención tras su atuendo fúnebre. Con la familia viene un decorador que dice saber de todo sin saber en realidad de nada llamado Otho.
Los atuendos que visten Delia y Otho están marcados por colores negros y blancos, acorde el gusto del director, rematándolo con las figuras tan extrañas que se erigen como obras maestras de la escultora.
Sin embargo son dos los personajes que marcan encarecidamente el estilo burtoniano por excelencia.
En primer lugar, Lydia, la joven incomprendida que expresa su malestar con la sociedad a través de sus atuendos negros y fúnebres, remarcados con su rostro pálido y sus ojos ensombrecidos para remarcar las ojeras, es el prototipo de personaje inadaptado que habita en el mundo de Burton. Sus creencias de que el mundo del más allá es mejor y sus pensamientos sobre el suicidio se verán cambiados una vez conozca a Adam y Bárbara, en los que verá unas figuras paternas más comprensibles y cercanas a como son las suyas reales, exponiendo la verdadera razón de su aislamiento social: el creerse invisible ante quienes la rodean.
En segunda lugar tenemos al personaje que da titulo al film, Beetlejuice. Publicitado Bio-Exorcista que ayuda a los muertos a expulsar a los vivos de sus hogares. Es un ser alocado de apariencia repugnante, con una libido desorbitada, una dieta a base de cucarachas, y capaz de transformarse en cualquier cosa, en especial monstruos desagradables. Sus servicios se puede contratar diciendo su nombre tres veces, ya sea por muertos como por vivos, eso si las consecuencias no están contempladas ni en la letra pequeña del contrato. Al fantasmagórico personaje le gustan las travesuras, y cuanto mas grandes y terroríficas mejor. Anterior ayudante de la asistente de los muertos, Beetlejuice se independizó laboralmente debido a sus particulares medios que le convierten en un compañero de trabajo insoportable, aún así la soledad no es buena para nadie, y el pintoresco personaje verá una posible nueva compañera en la gótica Lydia, a la cual le pide matrimonio, enlazando así el mundo de los vivos y los muertos. La apariencia de Beetlejuice se define por piel blanca con putrefacciones varias por el rostro y el cuerpo, ojos desorbitados redondeados por grandes sombras, pelos alborotados en su prominente cabellera, y estilo variopinto en su forma de vestir que va desde disfraz de cowboy hasta traje elegante, y polvoriento, de novio malva. Sin embargo su imagen más recordada e icónica, y que es portada de cartel, es en la que viste un elegante traja a rayas blancas y negras propias del estilo Burton.

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Tim Burton demuestra sus habilidosas dotes aprendidas en el mundo de la animación a base de storyboard con planos elegantes que van desde contrapicados a grandes planos generales que acaban en planos detalles como son el magistral del principio en que nos engaña haciéndonos creer que vemos la casa, que tiene cierto parecido a la de “Psicosis”, a tamaño real para dar paso a la aparición de una araña en su fachada y a la mano de Adam que la atrapa descubriéndoos que es una pieza de la maqueta que recoge todo el pueblo. Esta secuencia será repetida por el director en, por ejemplo, “Eduardo Manostijeras”, de nuevo con utilización de maqueta para hacernos un travelling a través del pueblo hasta llegar al castillo, y en donde se verá el cariño que tiene el director a la forma artesanal de realizar las películas .
Puesto que se habla de fantasmas y hay algún que otro momento terrorífico (las pruebas que hacen Adam y Bárbara para asustar, que incluyen arrancarse la cabeza o ahorcarse), rematado con sesiones de espiritismo, la película no podía perder la oportunidad de tener referencias a otro films como son el anteriormente citado de “Psicosis” o a “El Exorcista” y “Al final de la escalera” en las sesiones de espiritismo. Hay cierta referencia a “Dune” en las escenas de las dunas con sus característicos gusanos de arena maquillados con líneas blancas y negras.
Danny Elfman realizo una portentosa Banda Sonora con un memorable tema principal, el primero de la larga lista que crearía para el director. El Departamento de Maquillaje hizo un excelente trabajo para crear la apariencia del ser imaginado por Burton galardonado con el Oscar.
El reparto está formado por actores de la talla de Alec Baldwin y Geena Davis, dando vida a los recientes difuntos, que no acaban de dar el do de pecho del todo, además de quejas de Baldwin que declaró no sentirse satisfecho con los Efectos Visuales del film. Catherine O´Hara está muy bien como Delia, igual que Glenn Shadix como Otho. Burton trabajaría aquí con actores que volverían a estar a su mando en posteriores ocasiones como son Winona Ryder, dando vida excepcionalmente a la gótica Lydia y Jeffrey Jones dando un toque algo infantil al constructor Charles. Sin embargo el que se lleva todos los honores por componer un personaje memorable, el primero en la larga lista de personajes memorables Burtonianos, es Michael Keaton. El actor realiza una soberbia interpretación a través de la voz y de sus salvajes ojos, ayudado por el excelente maquillaje. Tras esto, se enfundaría el traje del hombre murciélago. Y ahora la pregunta del millón ¿qué demonios le pasó a un actor tan bueno como él reciclado hoy día en producciones destinadas al mercado del DVD? Rescátenlo por favor.

Como apunte diré que en la película de 1996 “The Frighteners” de Peter Jackson, por otro lado magnifica, hace alusión visual a este film en el diseño de los títulos de presentación remarcados por un haz de luz azul, y por la música de Danny Elfman. Además de hablar de nuevo de la relación entre vivos y muertos y de la posibilidad que tiene un vivo de ver a los del otro barrio.

La película fue un sonado éxito de taquilla, que tuvo una serie de Tv animada, y puso en el punto de mira a Tim Burton, del cual podemos considerar este su primer largometraje fiel a su estilo, en donde demuestra su amor por el mundo de los muertos con su característico humor negro consiguiendo una película divertidísima. Una película genial.

Lo Mejor: El estilo del director plasmado en cada fotograma. Michael Keaton.

Lo Peor: Nunca me han convencido Alec Bladwin y Geena Davis en esta película.

8 comentarios en “BeetleJuice, de Tim Burton

  1. Resulta curioso, pero es cierto que a pesar de ser legalmente los protagonistas, Baldwin y Davis quedan relegados a un segundo terminno por la personalidad de Ryder y, sobre todo, Keaton.

    Saludos.

  2. para mi el señor tim burton es un ejemplo a seguir, grasias a el y sus peliculas pude descubrir para que soy, aora estoy en bellas artes en plasticas solo para poder llegar como a mi ejemplo a seguir que es este señor, tambien ago el eston mouchon (no se si asi se escriba), y si ubiera una oportunidad de estudiar con este genio gotico la tomaria, grasias por poner este lugar de comentarios y adios

  3. hehehe……tim burton tiene una inmaginacion rara i todo lo raro me enkanta (lo digo en wuen sentido) xD pzz sii es la vdd i beetlejuice , charlie la fabrica de chocolate,batman,eduardo manos de tijera awww pra ke mas me enkantan…. no ce si sera gothico o algo x el estilo pro me parece genial todoo ….es bastante curioso….pro la unika es el tal jack ese sii lo odio xS …

  4. Amo esa pelicula es una de mis favoritas de Tim Bururton.
    Bueno las son todas!. Y tiene razon el chavo q dijo q hicieran la segunda parte pero se ria aruinar la primera y ya no seria lo mismo para los demas. No soy una conosedora de peliculas pero se lo q le gusta al publico. jejejejejeje.
    PD:El q me entendio, me entendio jajajajaja